¿Dolor crónico después de un latigazo cervical?

¿Por qué algunas personas no se recuperan después de un latigazo cervical?

A medida que vaya leyendo, descubrirá por qué, tras una lesión por latigazo cervical, algunas personas ya no son las mismas e incluso las actividades cotidianas normales se convierten en una carga. En casos extremos, ya no es posible realizar el trabajo correctamente, uno se vuelve retraído y su vida social se ve gravemente afectada.

Lo que se puede diagnosticar después de un traumatismo cervical es un posible daño estructural o un estiramiento de ciertos ligamentos y músculos de la columna cervical. Las lesiones por latigazo cervical especialmente graves pueden implicar la fractura de vértebras o la rotura de ligamentos y tejidos blandos. Más allá de estos diagnósticos, se desconocen en gran medida las verdaderas razones por las que algunas personas desarrollan un dolor crónico sin motivo aparente tras una lesión por latigazo cervical.

Latigazo cervical: muchas preguntas

Es posible que su médico haya intentado convencerle de que sus dolencias son sólo psicosomáticas o incluso que le clasifique como un "paciente imaginario", alguien que "sólo está presumiendo". Pero usted sabe muy bien que sus dolores son reales y que seguramente no los tenía antes del latigazo cervical.

El problema es el siguiente: después de un latigazo cervical, la práctica es buscar daños estructurales graves, como fracturas de huesos o lesiones de ligamentos. Si el médico no encuentra tales daños, concluirá que no hay nada malo en usted. Por lo tanto, considerará suficiente que "se cuide y guarde reposo", quizás con la ayuda de un collarín.

Los traumatismos por latigazo cervical no siempre causan lesiones lo suficientemente graves como para ser diagnosticadas por un médico. Incluso los desequilibrios y desajustes aparentemente insignificantes de las vértebras cervicales pueden provocar a menudo molestias crónicas.

La columna cervical: un mecanismo de precisión

Por regla general, los desajustes vertebrales no son tenidos en cuenta por la medicina convencional. Una de las razones es que los ligeros desplazamientos de las vértebras no se detectan suficientemente con una radiografía o una resonancia magnética. El médico busca daños estructurales evidentes y no desajustes funcionales de las vértebras.

Otro problema, que queda totalmente oculto en los exámenes que se realizan normalmente, es la compresión anormal de nervios y vasos sanguíneos que pueden provocar las vértebras cervicales, al haberse desviado de su alineación ideal tras el latigazo. Investigaciones mucho más específicas, como una angiografía, podrían revelar la reducción del flujo sanguíneo, pero se trata de una prueba invasiva que intentamos evitar. Lo que dificulta aún más el diagnóstico es el hecho de que, para una verdadera comparación, se necesitan mediciones antes y después del evento, mientras que en el caso del latigazo cervical sólo son factibles las mediciones después de la lesión. Lo mismo ocurre con un eco-Doppler; sin un valor de referencia previo, cualquier comparación carecería de sentido.

De este modo, el médico llega al veredicto de que "se desconoce el motivo de la persistencia de las molestias después del latigazo cervical" y, lo que es más grave, que se puede excluir una recuperación del paciente.

Volviendo al ejemplo del reloj: ¿qué pensarías del relojero al que acudes para que te lo repare si te dice que el reloj funciona perfectamente y que no es el RELOJ el que se retrasa siempre, sino que eres TÚ el que se retrasa demasiado? ¿Te suena la frase "deberías aprender a vivir con tu problema" o "tu problema es sólo psicosomático o imaginario"?

Con Atlantomed tenemos por fin un método para restablecer el equilibrio de la columna cervical tras una lesión por latigazo cervical.

El objetivo de Atlantomed no es tratar los daños estructurales (huesos rotos, músculos o ligamentos desgarrados), éstos deben ser siempre diagnosticados y tratados por un médico. Además, no realizamos manipulaciones cervicales y nuestro trabajo no se limita a un simple masaje.

¿Qué ocurre exactamente durante el latigazo cervical?

Las víctimas del latigazo cervical que, tras someterse a todas las investigaciones y tratamientos convencionales, no han podido recuperarse del todo, suelen tener la sensación de que algo va mal en el interior de su cuello. Simplemente no es lo que solía ser. Esto es cierto en la mayoría de los casos.

Esta situación provoca la compresión de la médula espinal, de las arterias vertebrales, de la arteria carótida, de otros vasos sanguíneos y de los canales linfáticos: consecuencias prácticamente imposibles de diagnosticar con los exámenes instrumentales habituales.

Una vez que la desalineación del atlas se ha establecido, si no se corrige con una técnica eficaz como Atlantomed, pueden desarrollarse los típicos síntomas crónicos tardíos del latigazo cervical.

Molestias tardías después de un latigazo cervical

Contracción crónica de los músculos cervicales después de un latigazo cervical

Muchas personas que sufren un latigazo cervical son víctimas de la siguiente experiencia desagradable: el dolor resultante del traumatismo, en lugar de remitir, empeora con el tiempo y se vuelve crónico, convirtiéndose en una pesadilla.

La causa no es sólo la posición especialmente desalineada del atlas, sino también una tensión excesiva en los músculos cervicales profundos, que ha sido creada por el traumatismo y luego perpetuada por el cuerpo con fines de protección.

Los músculos del cuello, que se han sobrecargado durante el traumatismo, permanecen permanentemente tensos y se acortan. Incluso los masajes continuos y los tratamientos de fisioterapia no suelen aliviar estas tensiones de forma eficaz, ya que los músculos afectados se encuentran en lo más profundo y, por tanto, no se puede llegar a ellos con la mano. Los movimientos de la cabeza suelen estar restringidos y causan dolor.

Verticalización de la columna cervical

El enderezamiento de la lordosis cervical, la pérdida de lordosis cervical y la pérdida de lordosis fisiológica son términos que indican lo mismo, es decir, una condición en la que la columna cervical se vuelve demasiado recta en relación con su forma fisiológica correcta.

Tras una lesión por latigazo cervical, la pérdida de la lordosis cervical fisiológica es muy común y a menudo se subestima. Las consecuencias a largo plazo se arrastran, con un impacto perjudicial para la salud.

Si la condición cervical descrita anteriormente se mantiene durante mucho tiempo, sin una intervención adecuada para corregirla, hay muchas posibilidades de acabar con una columna cervical erguida. Estas son algunas de las consecuencias:

Qué hacer después de un latigazo cervical

¿Qué hacer? El aparato AtlantoVib 4 con vibrorresonancia, utilizado para corregir el Atlas, viene al rescate. Llega a los músculos más profundos con un masaje muy intenso y eficaz.

Gracias a una o dos sesiones dirigidas principalmente al cuello, los músculos pueden finalmente relajarse. Una vez resueltas las contracturas, la cabeza puede volver a moverse libremente, con gran alivio.

Este tipo de masaje, combinado con la corrección de la desalineación del Atlas, ya ha conducido a una remisión completa de las dolencias del latigazo cervical incluso en casos considerados "irresolubles".

Alcune testimonianze dal forum

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