Hay dos maneras de comprobar la posición del Atlas:
EXAMEN PALPATORIO: la determinación de la posición del Atlas mediante la palpación requiere habilidades específicas y una gran experiencia. Por ello, el margen de error de un examen realizado por un terapeuta no especializado en el Atlas es del 50%.
EXAMEN RADIOLÓGICO: la alternativa a la palpación es un examen de TC-helicoidal o una Tomografía Computarizada de Haz Cónico CBCT. Esta solución es más precisa, pero también más cara y menos saludable, debido a la exposición a la radiación ionizante.
Dado que la palpación en los Centros especializados Atlantomed se realiza con la debida habilidad, competencia y seguridad, esta solución debería ser siempre la primera opción.
El examen radiológico sólo es apropiado en casos especiales, a criterio del especialista Atlantomed, en colaboración con el médico tratante.
Nadie puede decir con seguridad si tu Atlas está en la posición correcta o no, basándose únicamente en tus síntomas. Tus síntomas pueden tener otras causas. La opción más sensata es consultar a un especialista cualificado Atlantomed que tenga la experiencia y los conocimientos necesarios para comprobar la posición de tu Atlas, con un cuidadoso examen manual.
Si el resultado de la prueba, que sólo dura unos minutos, es negativo, no te cobraremos nada.
Por favor, te pedimos que entiendas que no podemos evaluar la posición de tu Atlas por correo electrónico o por teléfono basándonos en tus síntomas. Debes acudir a un Centro Atlantomed para obtener una respuesta.
Por regla general, los informes médicos y los exámenes radiológicos NO son necesarios. Sólo en casos raros y muy específicos la tomografía computarizada puede ser indispensable. En cualquier caso, tu especialista Atlantomed valorará la necesidad de hacerlo, después de haberte examinado personalmente.
Las radiografías y las resonancias magnéticas son prácticamente inútiles para visualizar y evaluar la desalineación del Atlas. Sólo una tomografía computarizada, correctamente realizada, permite identificar con precisión la posición del Atlas en relación con el cráneo.
Desgraciadamente, la experiencia demuestra que la determinación de la posición del Atlas por parte de un terapeuta o fisiatra NO especializado en la corrección del Atlas suele ser completamente incorrecta. Su evaluación se limita al estado de los músculos y a la limitación de los movimientos de la cabeza.
Las técnicas de palpación manual que se enseñan en los cursos de formación provienen de “profesores” que invariablemente no han verificado radiológicamente la fiabilidad de las pruebas que enseñan, habiéndolas aprendido ellos mismos de libros o de otros, que a su vez nunca la han verificado.
Como ya se ha indicado, una simple radiografía o resonancia magnética no es suficiente. ¿Cuál crees que es la consecuencia de todo esto?
¡Exactamente! La posición real del Atlas no es detectada. Piénsalo: si antes del tratamiento no se conoce con precisión la posición inicial del Atlas, y mucho menos si la vértebra está realmente desalineada, ¿cómo se puede esperar proceder a una corrección que pueda describirse como tal? ¿Cómo se puede afirmar entonces que el problema se ha resuelto y que la vértebra se habría sido alineada? ¿Crees que si no fue posible individuar la posición ANTES, será posible hacerlo mágicamente DESPUÉS? Como tu, como paciente, no tienes forma de verificar lo que te dicen, te ves obligado a creer las afirmaciones del terapeuta o del médico de turno. Desafortunadamente, a menudo son infundadas. Inmediatamente después de la manipulación cervical, te dicen que te han corregido la vértebra, y a la siguiente te dicen que vuelve a estar fuera de su sitio y que tienen que volver a corregirla, y así una y otra vez, para poder tenerte como paciente de forma habitual.
Pregúntate ¿cómo es posible que con Atlantomed el problema se resuelva definitivamente en 2 sesiones, mientras que otros terapeutas, con sus manipulaciones de décimas de segundo, quisieran tratarte continuamente? Aunque los pacientes de “de suscripción” sean mucho más lucrativos, ¿por qué crees que en Atlantomed es suficiente con verse sólo dos veces (dejando de lado las excepciones y los casos especiales)? ¿Tal vez porque procedemos de forma completamente diferente, con la intención de resolver el problema de una vez por todas?
El tratamiento por parte de profesionales no especializados en el Atlas y que no disponen de la técnica y del equipamiento de Atlantomed, en el mejor de los casos, modifica el tono de la musculatura circundante, quizás aumenta la movilidad del cuello, pero no corrige realmente la posición de la vértebra. En la creencia de que la alineación de la vértebra se ha producido, el paciente sale de la clínica del terapeuta de turno, con todos los inconvenientes de salud que supone vivir con una vértebra que sigue desalineada, exactamente igual que antes de entrar en la consulta.
Esta dolorosa realidad la vemos incluso al principio de los cursos de formación para volverse especialista Atlantomed, en los cuales sólo participan fisioterapeutas y osteópatas cualificados. La comprobación de la posición de la vértebra del mismo sujeto examinado suele dar lugar a 2-3-4 respuestas diferentes y contradictorias. Y estamos hablando de fisioterapeutas y osteópatas cualificados y con experiencia, a los que tu también sueles acudir.
¿No lo crees? Deja que 5 quiroprácticos, osteópatas o fisiatras diferentes te hagan una prueba manual de tu Atlas, después de haberse sometido previamente, sin que ellos lo sepan, a una tomografía computarizada helicoidal que te permita saber de antemano la posición de tu vértebra. ¡El resultado te sorprenderá!
Lee también la FAQ: “¿Puede mi terapeuta de confianza corregir el Atlas?”